Cambiando de siglo!!!

Llegados a Nantes, descansados, relajados y a partir de ahora pudiendonos tomar el viaje sin prisas ni autopistas aburridas, con menos kilometros y parando a ver todo lo bonito que nos muestra la Bretaña empezamos dirección Brest.

 A partir de Nantes, esta ciudad incluida,  todo es historia viva de hace muchos siglos en las ciudades, pueblos o aldeas que nos cruzamos en el camino. Parece mentira que todo siga en pie en igual o mejor estado que antaño y si eres un fan de las peliculas de época sin duda podrás cerrar los ojos y meterte más aún en como vivían hace años los bretones. Nosotros nos quedamos maravillados con cada rincón que iba apareciendo a cada kilometro y aunque es imposible pararse en todo intentamos disfrutar de los que nos parecieron mejores. Carreteras de ensueño para motoristas en las que los arboles te encierran y recorres kilometros y kilometros como si estuvieras adentrandote en un bosque. Pueblos, aldeas...todos con un encanto especial y sobretodo muy cuidadas y muy, muy limpias. Uno de los lugares de costa que más nos gustó en todo el viaje fué Saint-Nazaire, pequeña ciudad rodeada de agua, a un lado el Rio Loira y al otro el Atlantico, llena de vida por su puerto, su paseo maritimo y su gente. 

Avanzamos hacia Vannes y ya descubrimos una preciosa ciudad que alberga una gran muralla con sus torres de defensa que en su dia protegió el pueblo que conserva dentro. También podemos ver una gran cantidad de casas con entramado de madera ( estructura ) en muy buen estado de conservación lo que hace que te envuelva más en la época.

Seguimos por Lorient hasta Concarneau donde visitaremos la Ville-Close o ciudad amurallada, un pequeño islote que resiste en el tiempo y nos muestra otro pequeño trozo de historia de este lugar, animado y primer puerto pesquero de atún de Europa.

Volvemos a la ruta y pasamos por Quimper, capital del departamento de Finisterre aquí en Bretaña y seguimos descubriendo lugares maravillosos hasta Locronan, uno de los pueblos con mas encanto y más bonitos de la Bretaña.

 Aquí todo parece ambientado en otra época y con sus calles adoquinadas y edificios conservados tal cual hace años podrias imaginarte que en cualquier momento podrían aparecer unos caballeros montados a lomos de sus caballos.
Despues de recrearnos en Locronan avanzamos por Le Faou hasta Brest donde haremos parada a comer en el animado muelle de Commandant-Malbert en el restaurante  Les Quatre Vents a pie de puerto en el comeriamos de menú a muy buen precio y muy bien, totalmente recomendable. 

Increibles paisajes¡¡

Brest al fondo.

De Brest nos movemos hacia Josselin, otro pueblo precioso de la Bretaña, lleno de casas preciosas y muy cuidadas y rincones con mucho encanto.

 Acabariamos nuestra etapa en Taupont donde llegariamos de casualidad buscando el Camping du Lac, un lugar maravilloso donde poner la tienda de campaña con un paisaje precioso y una tranquilidad perfecta. Mientras cenamos unas hamburguesas que compramos en Ploermel seguimos comentando la "aburrida" o escasa vida social de los franceses entre otras cosas pues nos sorprende que despues de las jornadas de trabajo se vayan para sus casas y las calles de estos pueblos o pequeñas ciudades queden desiertas y llenas de tranquilidad para el uso y disfrute de sus unicos visitantes, los turistas.

Meterse en por el interior de la Bretaña desde Brest en vez de seguir por la costa ha sido un acierto pues nos regala paisajes y carreteras en las que por lo menos yo disfruto como un enano conduciendo y creo que la pasajera tambien..jejjejeje. Nos recuerda a nuestra tierra pero a lo grande, muy grande... y sin duda nos está encantando este viaje así que toca descansar y seguir hacia el Mont Saint-Michel.